La Asociación Dominicana de Profesores (ADP) en Santiago demandó este jueves del Gobierno una explicación sobre cómo se garantizará la inscripción y docencia de miles de estudiantes en medio de un panorama de déficit de aulas, obras escolares paralizadas y centros educativos aún en construcción.

Miguel Jorge, presidente del gremio magisterial en Santiago, cuestionó con ironía si las autoridades tienen una «fórmula mágica» para resolver la falta de cupos a casi un mes del inicio del año escolar.

«Gobierno tras gobierno enfrentamos las mismas situaciones. En la zona sur de Santiago, por ejemplo, hay una altísima demanda de cupos y la respuesta sigue siendo insuficiente», afirmó.

Según denunció, el problema no es nuevo, pero se agrava por la paralización de importantes proyectos de infraestructura educativa, como el politécnico Las Mercedes, que pudo haber aportado 24 aulas si se hubieran retomado los trabajos hace dos meses, cuando el director de Infraestructura Escolar anunció un llamado «plan 24-7».

• «Luego de una breve reactivación, los trabajos se detuvieron otra vez en el politécnico», lamentó Jorge.

El panorama se repite en comunidades como La Noriega, Villa Olímpica, Francisco del Rosario Sánchez, así como en planteles como la escuela Santiago Espaillat, Arturo Jiménez en Gurabo y Mérida Girart, donde las obras de ampliación del nivel inicial siguen inconclusas.

«En la escuela Mérida Girart, durante todo el pasado año escolar los niños recibieron docencia en condiciones inadecuadas y al día de hoy esas aulas no han podido ser terminadas», denunció.

La ADP también arremetió contra el uso de aulas móviles, calificándolo como una improvisación que evidencia la falta de planificación del Ministerio de Educación.

Situación crítica en la provincia

El gremio advirtió que la problemática se extiende a municipios como Navarrete, Villa González, Jánico y San José de las Matas, donde el déficit de infraestructuras escolares limita gravemente el acceso a una educación digna.

Casos particularmente alarmantes, según la ADP, se registran en El Aguacate, en Jacagua, y El Arroyo, en Gurabo, donde las escuelas fueron demolidas para levantar nuevos planteles y, dos años después, los estudiantes continúan recibiendo clases en iglesias comunitarias.

Un llamado al Gobierno

La ADP en Santiago exigió al Gobierno actuar con responsabilidad y garantizar el derecho a la educación con infraestructura adecuada y una planificación efectiva.

Fuente: Diario Libre